LO QUE NADIE DICE
|El misterio de la turista desaparecida en Punta Cana: una investigación con más preguntas que respuestas
Punta Cana, República Dominicana. La desaparición de Sudiksha Konanki, una turista de origen indio-estadounidense de 20 años, en un lujoso hotel de Punta Cana ha encendido las alarmas de las autoridades locales e internacionales.
El principal testigo y, hasta el momento, el único señalado en la investigación es Joshua Steven Ribe, joven estadounidense que fue visto en las últimas imágenes junto a Patel. De acuerdo con su versión, ambos se quedaron en la playa tras la partida del resto del grupo. Carter asegura que una fuerte ola arrastró a la joven al mar y que, a pesar de intentar ayudarla, no pudo rescatarla.
Posteriormente, menciona haber permanecido en la playa hasta la mañana siguiente, cuando, según su testimonio, volvió a verla caminando por la orilla antes de regresar solo a su habitación. No obstante, sus declaraciones han generado escepticismo, ya que ha ofrecido al menos tres versiones distintas de los hechos.
El abogado penalista Pedro José Duarte Canaán, reconocido experto con más de 40 años de trayectoria en la República Dominicana, ha expresado su preocupación sobre el manejo del caso. Según el especialista, la falta de una hipótesis sólida y la demora en la recopilación de pruebas clave podrían comprometer la resolución del caso. “Las pruebas forenses, como el análisis de restos bajo las uñas del principal sospechoso o una evaluación de su ropa, deberían haber sido prioridad desde el inicio”, apuntó Duarte Canaán.
Pedro José Duarte Canaán reveló que el joven Joshua ha tenido reportes de episodios de agresividad en la universidad donde estudia en los Estados Unidos y que la hipótesis del arrastre de la ola es muy frágil.
Por otro lado, la implicación del FBI en la investigación ha generado expectativa. La cooperación internacional podría aportar nuevas herramientas y metodologías que permitan esclarecer los hechos, aunque también ha puesto en evidencia las deficiencias de los organismos locales. “Si este caso hubiese sido manejado únicamente por las instituciones dominicanas, es probable que quedara en la impunidad”, sentenció el abogado.
A nivel mediático, el caso ha generado controversia en los Estados Unidos, donde diversas cadenas internacionales han cuestionado la seguridad de los destinos turísticos en la región. La presión sobre las autoridades dominicanas es evidente, pues una mala gestión del caso podría impactar negativamente en la industria turística del país, un pilar clave de su economía.