ENCUENTRA 500 GRAMOS DE ORO
|Lo que parecía una caminata ordinaria junto al mar terminó siendo una experiencia inolvidable para una pareja que, sin buscarlo, encontró un objeto de alto valor material y emocional. Mientras paseaban por la costa, las olas del mar arrastraron hasta la orilla una lujosa cadena de oro macizo, cuyo peso superaba los 500 gramos y que estaba valorada en posiblemente unos 2 millones de pesos dominicanos.
Dicho objeto había sido previamente reportado como extraviado por una familia de la zona. Según lo informado, la pérdida fue compartida en redes sociales, específicamente en Facebook, donde los propietarios hicieron pública una recompensa de 5,000 dólares para quien devolviera la joya. Más allá del costo, los miembros de la familia señalaron que el verdadero valor era sentimental.
Luego de ver la publicación, la joven pareja decidió acudir a la zona costera donde se presumía que la joya podría haber quedado atrapada. Llegaron antes del amanecer y, al arribar, notaron que al menos otras cinco personas también estaban en la búsqueda entre la arena, algas y piedras.
Fue entonces cuando, en medio de la jornada, lograron encontrar la cadena. El artículo estaba semienterrado, pero en perfecto estado. Al identificarlo como el mismo objeto mencionado en la publicación, decidieron devolverlo de inmediato.
“La familia estaba sumamente agradecida”, comentó la joven, quien junto a su pareja entregó la joya sin dudar, una vez confirmaron su autenticidad. Hasta ahora no se ha confirmado si los dos jóvenes recibieron la recompensa ofrecida en la red social, aunque el acto en sí ha generado una gran respuesta positiva.
La historia rápidamente circuló por las plataformas digitales y ha sido ampliamente comentada como un ejemplo de honestidad. Usuarios de distintas partes del país han elogiado la decisión de la pareja, destacando su integridad al devolver algo que no les pertenecía, a pesar de su alto valor económico.
“Eso vale más que el oro mismo”, expresó uno de los muchos comentarios que aparecieron en línea. Gracias a su decisión, la familia no solo logró recuperar una joya importante, sino también reforzó la creencia de que los valores pueden seguir prevaleciendo, incluso en situaciones inesperadas.