ESTAMOS EN PROBLEMAS POR UNA DECISIÓN

Una reciente decisión tomada por el Parlamento iraní ha generado preocupación a nivel global, tras aprobar una moción que autoriza el cierre del Estrecho de Ormuz, un paso marítimo clave para el comercio energético mundial. Esta decisión ha comenzado a repercutir en los mercados y ya provoca inquietud en América Latina, incluyendo a la República Dominicana.

El Estrecho de Ormuz conecta a los principales productores de petróleo del Golfo Pérsico con los grandes consumidores del mundo. Por esta vía transita entre el 20 y el 25 % del petróleo utilizado globalmente. Su ubicación estratégica entre Irán y Omán y su estrechez, con apenas 34 kilómetros en su punto más angosto, lo convierten en un punto neurálgico de importancia económica y geopolítica.

La propuesta de cierre surgió como reacción a los recientes bombardeos por parte de Estados Unidos sobre instalaciones iraníes ubicadas en Isfahán, Fordow y Natanz. Esto ha provocado un incremento de la tensión diplomática y militar, cuyo desenlace sigue siendo incierto.

La decisión final sobre la aplicación de esta medida queda ahora en manos del líder supremo, el ayatolá Ali Khamenei. Si esta disposición es confirmada, los efectos económicos podrían sentirse de forma inmediata y severa en varias regiones del mundo. Países con alta dependencia de combustibles importados, como República Dominicana, podrían resultar especialmente afectados.

Expertos en temas energéticos advierten que un cierre total del Estrecho podría provocar un aumento de hasta un 50 % en el precio del petróleo a nivel internacional, superando los 100 dólares por barril. Esta proyección ha comenzado a generar preocupación en sectores políticos y económicos dominicanos.

Ante esta situación, Francisco Javier García, dirigente político, pidió al presidente Luis Abinader tomar medidas urgentes. “Le pido al presidente que convoque de inmediato al Consejo Económico y Social, junto a los sectores productivos y energéticos del país, para diseñar una estrategia nacional de contingencia ante una posible alza prolongada del petróleo”, expresó.

García también advirtió que si la tensión se mantiene, el precio del galón de gasolina en República Dominicana podría superar los 350 pesos. Indicó que también habría aumentos importantes en el costo del gasoil y del GLP. “Si no se actúa a tiempo, el alza se va a reflejar en la comida, en el transporte y en la tarifa eléctrica. El pueblo no aguanta otro golpe a su bolsillo”, subrayó.

El exministro sugirió al Gobierno implementar un fondo especial de estabilización de precios para proteger a los sectores más vulnerables. Además, propuso realizar compras anticipadas de petróleo y gas natural a través de contratos especiales. “Estamos ante una coyuntura global que puede durar semanas o meses. Se necesita liderazgo, previsión y una respuesta nacional articulada que no deje todo en manos del mercado internacional”, manifestó.

En el plano internacional, JD Vance, vicepresidente de Estados Unidos, afirmó que bloquear el Estrecho sería un error estratégico para Irán. “Suicidio económico”, lo calificó. Por su parte, el secretario de Estado Marco Rubio instó a China a actuar diplomáticamente para evitar mayores repercusiones. “Si lo hacen, afectará más a otras economías que a la nuestra”, afirmó en Fox News.

Donald Trump también se pronunció desde la red Truth Social, enviando un mensaje directo: “Cualquier represalia será respondida con una fuerza mucho mayor que la presenciada esta noche”.

Actualmente, más de 50 buques petroleros se apresuran a abandonar la zona por temor a quedar atrapados. Aunque algunos países de la región han desarrollado rutas alternas, estas son limitadas. Irak, Kuwait, Qatar y Baréin dependen exclusivamente del Estrecho, lo que los deja sin rutas viables en caso de que el cierre se concrete.

Francisco Javier García reiteró que, sin un plan inmediato de control de precios, subsidios y medidas contra la especulación, la población dominicana podría enfrentar un repunte inflacionario que afecte los productos básicos, el transporte y la energía. “El presidente Abinader debe poner esto en el centro de su agenda nacional. Ya no es una amenaza lejana, es una realidad que está a pocas horas de distancia”, concluyó.

En las próximas 72 horas se definirá el rumbo de esta crisis energética global. La República Dominicana debe actuar con rapidez para evitar impactos severos en su economía.