OFENSIVA SIN PRECEDENTES. MAS DE 100 CAEN
|El zumbido de los drones ha reemplazado al eco de los disparos en los barrios tomados por bandas en la capital haitiana, donde una ofensiva aérea sin precedentes ha marcado un punto de inflexión en la lucha contra la inseguridad.
Más de un centenar de presuntos integrantes de las temidas bandas de Gran Ravine y Village de Dieu han sido abatidos en las últimas 48 horas por drones armados desplegados por el grupo táctico del gobierno haitiano, según reveló este miércoles la Red Nacional de Defensa de los Derechos Humanos (RNDDH). Ofensiva letal con drones arrasa con cientos de pandilleros en Haití en solo 48 horas.
Desde marzo, cuando el primer ministro Alix Didier Fils-Aimé conformó esta célula operativa, los ataques no han cesado. El objetivo es recuperar los espacios perdidos en una ciudad donde el 85 % del territorio urbano está bajo control de estructuras armadas ilegales, que mantienen a la población bajo amenaza constante.
Uno de los puntos críticos fue la antigua escuela Maranatha, en el sur de la ciudad, ahora convertida en un bastión criminal. Allí se concentraban decenas de miembros armados, hasta que los drones detonaron con precisión quirúrgica. “El efecto ha sido devastador”, admitió Pierre Espérance, director de la RNDDH.
Aunque los líderes como Jimmy Cherisier, alias “Barbecue”, y Vithelhomme Innocent aún no han sido alcanzados directamente, sus estructuras han sufrido fuertes golpes. La pérdida de sus principales lugartenientes ha debilitado la cadena de mando y alterado el equilibrio de poder dentro de las coaliciones criminales como Vivre Ensemble.
Las redes sociales de estos grupos, usualmente desafiantes, ahora reflejan temor. En múltiples videos, miembros de bandas expresan su frustración por no poder defenderse de lo que describen como “ataques fantasma”.
Mientras tanto, la Policía Nacional de Haití ha intensificado su presencia en zonas antes intransitables como Kenscoff y Tabarre, esta última próxima a la embajada de Estados Unidos.
Ofensiva letal con drones arrasa con cientos de pandilleros en Haití en solo 48 horas
Jimmy Cherisier, alias “Barbecue”. Los operativos, apoyados por drones suicidas, han permitido la reactivación parcial de comercios y escuelas en comunidades antes totalmente paralizadas.
En Tabarre, Vithelhomme ha logrado evadir la captura, pero su entorno ha sido neutralizado en varias ocasiones recientes. Las fuerzas especiales haitianas mantienen una vigilancia cerrada sobre sus movimientos.
Entre enero y marzo de este año, 1,617 personas perdieron la vida y otras 580 resultaron heridas en episodios de violencia atribuibles a grupos armados, fuerzas de seguridad y civiles organizados, según la Oficina Integrada de Naciones Unidas en Haití (Binuh).
Las cifras totales de 2024 son aún más alarmantes: al menos 5,626 víctimas fatales, 2,213 heridos y 1,494 secuestros, lo que refleja un deterioro sin precedentes en la seguridad nacional.
Desde hoy, la presencia de drones marca un antes y un después en las estrategias del gobierno haitiano para recuperar el control territorial.


