Long Island, Nueva York.- La comunidad dominicana en Long Island atraviesa un momento de profunda tristeza por la pérdida de Robin Moscoso, un joven de 17 años que dejó de existir luego de que su mejor amigo manipulara de manera imprudente un objeto de fuego artesanal, conocido como “chilena”, en circunstancias que las autoridades continúan investigando.
De acuerdo con el testimonio de su madre, el adolescente acostumbraba a pasar la noche en la casa de su amigo Brian, con quien mantenía una relación cercana desde la infancia. Ambos compartían actividades cotidianas, videojuegos y reuniones familiares, lo que había generado un fuerte vínculo entre ambas familias.
La madre explicó que el hecho se produjo mientras los jóvenes jugaban y Brian manipulaba el objeto de fuego sin percatarse del peligro. En ese momento se produjo una detonación sin intención que alcanzó a Robin, provocando su deterioro inmediato.
El suceso ocurrió a pocos minutos del hogar familiar. Al recibir la noticia, la madre acudió al lugar de manera desesperada y encontró a su hijo en estado crítico. Los servicios médicos intentaron mantenerlo con vida, pero según confirmó la progenitora, el joven ya no presentaba signos vitales al llegar al centro asistencial.
Entre lágrimas, la madre describió el episodio como un evento doloroso e imposible de asimilar, subrayando la cercanía y el afecto que existía entre ambos adolescentes. Según relató, el origen del objeto de fuego estaría relacionado con un conflicto ocurrido semanas atrás, cuando los jóvenes participaron en un altercado en el que uno de ellos recibió una advertencia.
Esa situación habría llevado a Brian a fabricar o conseguir el artefacto de manera improvisada, sin conocimiento del riesgo que implicaba ni de las consecuencias que podría provocar. Robin cursaba estudios secundarios y, según su madre, era un joven tranquilo, amante de la música y los videojuegos, enfocado en sus estudios y en sus aspiraciones artísticas.
“Mi hijo era querido por todos, no tenía conflictos con nadie, solo quería terminar sus estudios y seguir con su música”, expresó la madre visiblemente afectada.
Las autoridades locales de Long Island han iniciado una investigación formal para determinar la procedencia del objeto de fuego y las circunstancias exactas en que ocurrió la detonación. Mientras tanto, la comunidad dominicana de la zona ha manifestado su consternación y ha ofrecido apoyo solidario a la familia Moscoso.
El caso se investiga como un incidente doméstico con un objeto de fuego, sin descartar que puedan presentarse cargos por posesión ilegal o negligencia dependiendo de los resultados de la pesquisa. La madre del adolescente pidió comprensión y justicia, reiterando que todo fue un suceso imprevisto entre amigos en un entorno considerado seguro.
La familia organiza el traslado de los restos de Robin Moscoso hacia República Dominicana, donde recibirá sepultura junto a sus seres queridos. Su historia refleja la preocupación creciente por el manejo irresponsable de objetos de fuego artesanales entre jóvenes, donde la confianza y la falta de orientación pueden derivar en consecuencias irreparables.
