
Santo Domingo, R.D.— La Policía Nacional, en coordinación con el Ministerio Público, investiga la pérdida de un niño de un año y ocho meses ocurrida este domingo en el sector Los Guandules, Distrito Nacional, atribuida a una presunta asfixia. Las autoridades trabajan para esclarecer las circunstancias que rodearon este hecho y determinar las responsabilidades correspondientes.
El principal sospechoso identificado es Dionys Anderson Zabala Reyes, padre del menor, quien fue detenido y permanece bajo custodia mientras se profundizan las pesquisas. Este presuntamente habría dicho que “Papá Dios me mandó“, sobre lo sucedido, según Noticias Telemicro. Las autoridades realizan entrevistas y análisis para recolectar evidencia que permita esclarecer cómo se produjo el incidente y si existen elementos que puedan derivar en acciones legales formales.
Durante la fase inicial de la investigación, la Policía procesó la escena del hecho y entrevistó a varios testigos, entre ellos familiares cercanos del detenido. Estos declararon haber observado comportamientos inusuales en el padre del menor en los días previos al suceso, información que podría resultar relevante para el desarrollo de la investigación y la comprensión del contexto que rodeó la pérdida del niño.

La Policía Nacional informó que se proporcionarán mayores detalles conforme avance la investigación. Las autoridades buscan reunir pruebas suficientes para determinar si procede la formalización de cargos y cuáles serían los pasos legales adecuados en este caso, garantizando que se sigan los protocolos judiciales correspondientes y se protejan los derechos de todas las partes involucradas.
El caso ha generado conmoción en la comunidad de Los Guandules, donde vecinos y familiares expresan su preocupación y expectativa de recibir información clara sobre lo ocurrido. La colectividad local espera que se esclarezcan los hechos de manera transparente y que, de confirmarse responsabilidades, se adopten las medidas legales correspondientes para asegurar justicia en este lamentable episodio.

Las autoridades reiteran su compromiso de realizar una investigación exhaustiva, recopilando testimonios, pruebas físicas y cualquier indicio que permita comprender las circunstancias del incidente. Mientras tanto, familiares y vecinos permanecen atentos al desarrollo de las diligencias, solicitando que se actúe con transparencia y seriedad para esclarecer la situación y garantizar que se tomen las decisiones apropiadas respecto al caso del menor.
La comunidad sigue acompañando a los familiares en este momento de dolor y expectativa, enfatizando la necesidad de respuestas oficiales y una investigación rigurosa que determine con precisión las causas que llevaron a la pérdida del niño y las responsabilidades asociadas.

