Santo Domingo, República Dominicana. – Las autoridades del Distrito Nacional han confirmado la entrega voluntaria de John Lariel Báez Álvarez, conocido en su comunidad como “John 42“, en relación con un lamentable incidente registrado en el sector de Capotillo. Báez Álvarez, de aproximadamente 20 años, es señalado como el presunto responsable de activar un objeto de fuego que resultó en heridas de gravedad a una niña de nueve años. El suceso ocurrió en la tarde del pasado miércoles en El Matadero, desatando una fuerte respuesta de vecinos y familiares de la menor afectada.
Detalles del incidente en Capotillo
Según informes preliminares proporcionados por la Dirección Central de Investigación (Dicrim), Báez Álvarez habría intervenido en una disputa que involucraba a su padre y dos hombres, momento en el cual, presumiblemente, tomó un objeto de fuego propiedad de su progenitor. Las detonaciones realizadas alcanzaron accidentalmente a la menor justo cuando esta se disponía a salir de su hogar para asistir a un ensayo de Batón Ballet.

En cuanto al estado de la niña, los familiares han confirmado su traslado inmediato al Hospital Marcelino Vélez Santana. Allí, fue sometida a una intervención quirúrgica debido a un impacto en el área torácica, una situación que ha conmocionado a los residentes de la localidad. Aunque su estado es delicado, el diagnóstico específico sobre su capacidad de movilidad aún no ha sido dado a conocer oficialmente por el personal de salud. Esta falta de información ha generado preocupación entre allegados y vecinos, quienes esperan con ansias un reporte médico más claro.
Reacciones y medidas preventivas
El objeto de fuego implicado fue entregado a las autoridades por el padre de “John 42”, que ahora también se encuentra bajo investigación para determinar su grado de implicación en los hechos. Mientras tanto, el vocero de la Policía Nacional, el coronel Diego Pesqueira, ha descrito el evento como un “conflicto social” que está bajo la supervisión del Ministerio Público. Aunque hasta ahora el joven no tiene antecedentes penales, su caso está siendo evaluado rigurosamente como parte de las investigaciones en curso.

El suceso ha provocado un oleaje de incertidumbre y temor en Capotillo, donde los residentes han expresado su alarma ante la falta de controles rigurosos sobre la posesión de objetos de fuego en las comunidades. Los familiares de la menor afectada, junto a diversas voces de la ciudadanía, han hecho un llamamiento urgente para que se refuercen las medidas de seguridad, especialmente en entornos vulnerables donde podría repetirse un episodio tan lamentable.

Las autoridades han reafirmado su compromiso de mantener un monitoreo constante del caso y aclarar todas las responsabilidades del suceso. El seguimiento de las pruebas halladas y el proceso legal aspira a sentar un precedente para evitar futuros incidentes y garantizar que la justicia prevalezca. Este hecho se mantendrá bajo una observación estricta, y se espera que el Ministerio Público emita una declaración oficial en los próximos días, detallando los avances y los pasos a seguir en este delicado proceso.


